La energía eólica en el mundo
Ya en el año 5.000 a.C. se utilizaba la energía eólica para impulsar las embarcaciones a lo largo del río Nilo. Hacia el año 200 a.C., en China se utilizaban sencillas bombas de agua accionadas por el viento, y en Persia y Oriente Medio se molían los cereales con molinos de viento con aspas de caña tejida.
Las nuevas formas de utilizar la energía eólica acabaron por extenderse por todo el mundo. En el siglo XI, los habitantes de Oriente Medio ya utilizaban las bombas de viento y los molinos para la producción de alimentos. Los mercaderes y los cruzados llevaron la tecnología eólica a Europa. Los holandeses desarrollaron grandes bombas de viento para drenar lagos y pantanos en el delta del río Rin. Los inmigrantes europeos acabaron llevando la tecnología de la energía eólica al hemisferio occidental.
Los colonos americanos utilizaron molinos de viento para moler el grano, bombear agua y cortar madera en los aserraderos. Los colonos y ganaderos instalaron miles de bombas de viento cuando se asentaron en el oeste de Estados Unidos. A finales del siglo XIX y principios del XX, también se utilizaron ampliamente pequeños generadores eléctricos de viento (turbinas eólicas).
El número de bombas de viento y turbinas eólicas disminuyó cuando los programas de electrificación rural de la década de 1930 extendieron las líneas eléctricas a la mayoría de las granjas y ranchos del país. Sin embargo, algunos ranchos siguen utilizando bombas de viento para suministrar agua al ganado. Las pequeñas turbinas eólicas vuelven a ser habituales, sobre todo para suministrar electricidad en zonas remotas y rurales.
Energía eólica en la India
Todo lo que se mueve tiene energía cinética, y los científicos e ingenieros están utilizando la energía cinética del viento para generar electricidad. La energía eólica, o energía del viento, se crea utilizando una turbina eólica, un dispositivo que canaliza la fuerza del viento para generar electricidad.
El viento mueve las palas de la turbina, que están unidas a un rotor. El rotor hace girar un generador para crear electricidad. Hay dos tipos de turbinas eólicas: las de eje horizontal (HAWT) y las de eje vertical (VAWT). Las HAWT son el tipo más común de turbina eólica. Suelen tener dos o tres palas largas y finas que se parecen a las hélices de un avión. Las palas están colocadas de forma que se orientan directamente hacia el viento. Las VAWT tienen palas curvadas más cortas y anchas que se asemejan a los batidores de una batidora eléctrica.
Las pequeñas turbinas eólicas individuales pueden producir 100 kilovatios de potencia, suficiente para alimentar una casa. Los aerogeneradores pequeños también se utilizan en lugares como estaciones de bombeo de agua. Los aerogeneradores un poco más grandes se asientan en torres de hasta 80 metros de altura y tienen palas de rotor de unos 40 metros de largo. Estas turbinas pueden generar 1,8 megavatios de potencia. Hay aerogeneradores aún más grandes encaramados en torres de 240 metros de altura y con palas de más de 162 metros de longitud. Estas grandes turbinas pueden generar entre 4,8 y 9,5 megavatios de potencia.
Altura de los aerogeneradores
Utilizar el viento no es una tecnología nueva. Desde hace miles de años el ser humano ha utilizado la energía del viento para facilitar la vida cotidiana, en el hogar, la agricultura y la industria. Hasta la última década del siglo XIX, la energía eólica se utilizaba en el cultivo de cereales, en el bombeo de agua y para impulsar barcos de vela. En el último siglo, la turbina eólica se ha utilizado como dispositivo para generar electricidad. Los avances en el campo de la aerodinámica, la ingeniería mecánica/eléctrica, la tecnología de control y la electrónica proporcionan la base técnica de las turbinas eólicas que se utilizan hoy en día.
Hasta ese momento, los aerogeneradores de eje horizontal giraban en sentido contrario a las agujas del reloj, pero a partir de 1978 se produjo un cambio y ahora, para presentar una visión coherente, todas las principales turbinas de eje horizontal giran en el sentido de las agujas del reloj.
En 2008, la empresa Enercon construyó la E-126 en Emden (Alemania), que es la turbina eólica terrestre más potente de la actualidad, con una capacidad de 7 MW. Tiene 131 metros de altura y un diámetro de rotor de 126 metros.
Estadísticas de la energía eólica
Según un informe del Laboratorio Nacional de Energías Renovables (Tabla 30), dependiendo de la marca y el modelo, las turbinas eólicas están hechas predominantemente de acero (66-79% de la masa total de la turbina); fibra de vidrio, resina o plástico (11-16%); hierro o fundición (5-17%); cobre (1%); y aluminio (0-2%).
Muchos de los componentes de las turbinas son de origen nacional y se fabrican en Estados Unidos. Según el informe sobre el mercado eólico terrestre de la Oficina de Eficiencia Energética y Energías Renovables, las torres de los aerogeneradores son en un 60-75% de origen nacional, los componentes de las palas y los bujes son en un 30-50% de origen nacional, y los conjuntos de las góndolas son en más de un 85% de origen nacional. Sin embargo, muchas piezas internas, como los sistemas de cabeceo y guiñada, los rodamientos, los pernos y los controladores, suelen ser importados.
Uno de los principales retos a los que se enfrenta la industria eólica es la posibilidad de que las turbinas afecten negativamente a los animales salvajes, tanto directamente, por colisiones, como indirectamente, debido a la contaminación acústica, la pérdida de hábitat y la reducción de la supervivencia o la reproducción. Entre los animales silvestres más afectados están las aves y los murciélagos, que al comer insectos destructivos aportan miles de millones de dólares de beneficios económicos a la…