Cambio climático b2
La educación es crucial para promover la acción climática. Ayuda a las personas a comprender y afrontar los efectos de la crisis climática, dotándolas de los conocimientos, las competencias, los valores y las actitudes necesarios para actuar como agentes del cambio.
La comunidad internacional reconoce la importancia de la educación y la formación para hacer frente al cambio climático. La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, el Acuerdo de París y la agenda asociada de Acción para el Empoderamiento Climático (ACE) instan a los gobiernos a educar, empoderar y comprometer a todas las partes interesadas y a los grupos principales en las políticas y acciones relacionadas con el cambio climático.
Ideas de proyectos escolares sobre el cambio climático
La educación es un factor esencial en la cada vez más urgente lucha mundial contra el cambio climático. El conocimiento de este fenómeno ayuda a los jóvenes a comprender y afrontar las consecuencias del calentamiento global, les anima a cambiar su comportamiento y les ayuda a adaptarse a lo que ya es una emergencia mundial.
Benjamín Franklin escribió una vez: “La inversión en conocimiento paga los mejores intereses”. En materia de medio ambiente, y más concretamente en todo lo relacionado con el cambio climático, la UNESCO hace suya esta opinión. Para la UNESCO, la educación, especialmente cuando se centra en los niños y los jóvenes, es un factor clave para ayudar a frenar el cambio climático. En concreto, afirma que “la educación… fomenta cambios en las actitudes y comportamientos de los jóvenes y les ayuda a adaptarse a las tendencias relacionadas con el cambio climático”.
En los últimos años se han puesto en marcha diversas iniciativas para intentar frenar el cambio climático. Entre ellas destacan los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) promovidos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) desde 2012. Uno de ellos, el número 13, se titula Acción por el Clima.
Ejemplos de cambio climático
El cambio climático es uno de esos temas importantes que pueden ser difíciles de abordar en el aula. Algunos profesores se enfrentan a la oposición de los padres, las comunidades o incluso a los requisitos del plan de estudios que niegan la existencia o la importancia del cambio climático. Sin embargo, es fundamental que los niños conozcan los hechos mediante actividades sobre el cambio climático que les ayuden a entender lo que está ocurriendo y por qué es importante. Prueba algunas de estas ideas con tus alumnos, acompañadas de un debate sobre lo que los niños pueden hacer para ayudar a mantener nuestro planeta sano en los años venideros.
En colaboración con Unicef, World’s Largest Lesson promueve el uso de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en el aprendizaje para que los niños puedan contribuir a un futuro mejor para todos. Conozca más sobre sus vídeos, lecciones y recursos aquí.
Un estribillo común que puedes escuchar es: “Hoy ha nevado 20 pulgadas, así que explícame cómo el calentamiento global es real”. Entonces es el momento de abordar la diferencia entre el tiempo (las condiciones actuales) y el clima (la media de esas condiciones a lo largo del tiempo en una región concreta). Haz una tabla de anclaje como esta de Hayley Taylor en Pinterest. A continuación, intenta realizar una actividad de clasificación para ayudar a los niños a entender la diferencia entre ambos. Puedes hacer tus propias tarjetas o encontrarlas en sitios como Teachers Pay Teachers.
Proyectos sobre el cambio climático para estudiantes de secundaria
¿Qué pasaría si, con un poco de liderazgo por parte de los jefes de Estado del mundo, incluidos el presidente de Estados Unidos, Biden, y el primer ministro del Reino Unido, Johnson, existiera la oportunidad de catalizar un movimiento en el país y en el extranjero que luche contra el cambio climático, fortalezca la salud cívica de las comunidades, cierre la brecha de aprendizaje en las habilidades laborales del siglo XXI entre las niñas y los niños de bajos y altos ingresos, y fortalezca la capacidad de los maestros? Puede sonar demasiado bueno para ser verdad, pero existe la oportunidad de que el liderazgo político encabece lo que llamamos una nueva agenda de aprendizaje verde -una nueva forma de educar e involucrar a niños, jóvenes y adultos en las soluciones climáticas-, dando rienda suelta a la creatividad de profesores y alumnos para que desarrollen y ejecuten proyectos de acción climática en sus hogares, escuelas y comunidades. Este enfoque de la enseñanza y el aprendizaje se basa en décadas de investigación sobre cómo aprenden los niños y ayuda a dominar los contenidos académicos básicos, a la vez que cataliza la acción climática.
Investigaciones recientes demuestran que si sólo el 16% de los estudiantes de secundaria de los países de ingresos altos y medios recibieran educación sobre el cambio climático, podríamos ver una reducción de casi 19 gigatoneladas de dióxido de carbono para 2050. Cuando la educación ayuda a los estudiantes a desarrollar una fuerte conexión personal con las soluciones climáticas, así como un sentido de agencia personal y de empoderamiento, puede tener un impacto consecuente en los comportamientos diarios de los estudiantes y en la toma de decisiones que reduce su huella de carbono en general a lo largo de su vida. Imaginemos que el 100% de los estudiantes del mundo recibieran una educación de este tipo. Los nuevos datos demuestran también que la combinación del empoderamiento de las mujeres y la educación que incluye a todo el mundo -especialmente a los 132 millones de niñas sin escolarizar en el mundo en desarrollo- podría dar lugar a una reducción de 85 gigatoneladas de dióxido de carbono para 2050. Según estas estimaciones, aprovechar el poder de la educación es potencialmente más poderoso que aumentar únicamente las inversiones en turbinas eólicas en tierra (47 gigatones de reducción) o en energía solar concentrada (19 gigatones de reducción). Cuando decimos que todas las soluciones climáticas son necesarias para reducir los gases de efecto invernadero, debemos referirnos también a las soluciones educativas.